viernes, 29 de mayo de 2009

¿DEMOCRACIA SIN INTERMEDIARIOS?

Es lo que ofrecen los iluminados de Casa Presidencial en una intensa publicidad. Por primera vez en la historia, dicen. Lástima que a la oferta le resta credibilidad el hecho de que lo hacen desde la comodidad de sus cargos bien remunerados ya que antes ni por cerca se les había ocurrido tal aspiración. Algunos están chupando dos y más coyoles al mismo tiempo al tener empleada a la familia con jugosos sueldos. El poder los volvió revolucionarios, caso insólito, porque siempre había ocurrido lo contrario, la revolución ha llevado a los revolucionarios al poder. Pero cosas veredes, Sancho amigo, como dijo El Quijote.

La democracia nació en Atenas hace más de 25 siglos como una democracia sin intermediarios. El hecho fue tan hermoso que desde entonces ha cautivado la atención de muchos teóricos de los sistema ideológico –políticos, entre ellos el ginebrino Juan Jacobo Rousseau. Así fue como llegó a enunciar la teoría de la soberanía popular, pero al rechazar la representación política su teoría llega a un callejón sin salida y desemboca en una especie de tiranía de la sociedad sobre la persona individual que tuvo su más trágica expresión en el régimen de terror que siguió a la Revolución Francesa.

¿Por qué la democracia directa, sin intermediarios, sólo fue posible en Atenas? Porque era una comunidad de aproximadamente 13. 000 personas, es decir como cualquier ciudad mediana de Honduras. De esa cantidad habría que excluir a los menores de 20 años, que no podían participar en la Asamblea que se reunía en la plaza pública, en el ágora, con lo cual quedaba fuera la mitad de la cantidad mencionada. Se excluían asimismo los esclavos, los extranjeros y las mujeres que tampoco podían participar. ¿Cuántas personas al final se reunían para tomar decisiones sin intermediarios? ¿Unos mil o mil quinientas? Pues ocurre que de los que podían participar no todos participaban y había que pagarles para que se interesaran en la participación a la cual tenían derecho. Al final era una minoría la que decidía con su presencia física por la sociedad total.

En Honduras somos 7 millones y medio de personas de las cuales 4.3 millones somos ciudadanos con derecho a la participación política. Sólo quedan excluidos los menores de 18 años, los miembros de los cuerpos de seguridad del Estado y los reos sentenciados por causa de delito puesto que en la sentencia se les suspende la ciudadanía.

La Asamblea en Atenas se reunía diez veces al año para decidir sin intermediarios todo lo concerniente a la vida en la polis, en la ciudad.

¿Dónde nos van a reunir los iluminados a 4.3 millones de personas para decidir colectivamente? El único lugar es el Valle de Sula con parlantes en la montaña de Merendón y helicópteros para trasladar a los oradores. Habría que pagarles transporte y estadía lógicamente con los dólares que da ALBA Y PETROCARIBE.

No es posible. Por eso los iluminados, al desechar la democracia representativa como hizo Rousseau y satanizar sus instituciones como el Congreso, han optado por la democracia representativa que no es democracia sin intermediarios. Quienes más han teorizado sobre ese modelo han sido los ideólogos de la Democracia Cristiana como Rafael Caldera, Enrique Pérez Olivares, Vivas Terán, el Dr. Castillo en Chile, Radomiro Tomic y otros. No elimina la democracia representativa, sino que la complementa. Se trata de organizar diferentes niveles de participación en la sociedad civil para que sean consultados por los órganos representativos sobre asuntos de interés público más los mecanismos del referéndum y el plebiscito para consulta general, incluye la cogestión y la autogestión en las empresas.

 

La democracia representativa es todavía un modelo teórico en proceso de elaboración. Algún intento se hizo para llevarlo a la práctica en algún gobierno populista de corte militar en América del Sur, pero luego se volvió a la democracia representativa cuyas debilidades no queremos negar, pero es la única que hasta hoy ha funcionado en el marco del Estado moderno, extenso en territorio y grande en población.

 

¿A qué llaman los iluminados que el pueblo decida por primera vez sin intermediarios? A que en una cuarta urna decida si se convoca o no a elecciones para que el pueblo elija los intermediarios que integrarán la Asamblea Constituyente que en nombre y representación del pueblo elabore una nueva constitución cuyo texto ya tienen elaborado. Mire, usted. Y lo peor es que los diputados del actual odiado Congreso serán los constituyentes, porque se supone que son los líderes de sus departamentos, salvo excepciones. La misma mica en distinta rama.

 

¿Cuál sería el contenido de esa nueva constitución que sustituirá a la vieja violada de hoy? Dice Rixi que va a pasar a poder del Estado los recursos naturales, que ya son del Estado, las empresas públicas que se llaman así porque son del Estado, el espectro ese que sirve para que funcionen las estaciones transmisoras de radio y televisión que ya es del Estado.

 

¿Entonces? Dice Tito Mejía, a quien le han puesto el apodo de comisionado Vicepresidente, que la Constitución es muy vieja a los 25 años mientras los alemanas acaban de celebrar los 60 años de la suya que no es de las más viejas de Europa. ¿Entonces?

 

La cuarta urna, que quedará como un mecanismo permanente de consulta según ha dicho el Presidente Zelaya, servirá para que el pueblo decida en forma libre y sin intermediarios, como en Atenas, lo que convenga a los iluminados bien remunerados de turno. ¿Qué le parece? Si creyéramos en eso, sería una prueba de que los hondureños no descendemos del mono, sino del guanajo, del jolote, símbolo de los dundos sin intermediarios.

jueves, 28 de mayo de 2009

ESTE MACHO ES MI MULA

Es una frase muy gráfica que usa el pueblo para indicar que alguien es terco, intransigente. Fulano cuando dice este macho es mi mula no hay quien lo haga cambiar. Los extremos siempre son incorrectos. Poco confiable es quien cambia de opinión con mucha facilidad como quien se aferra tercamente a una posición, auque sepa que está equivocado. Para el manejo de los conflictos interindividuales o sociales ambos comportamientos son perjudiciales.

La intransigencia ha impedido que se encuentre una solución a los problemas de la Universidad Nacional y lo que está pasando con la harto publicitada cuarta urna. Soy profesor de la UNAH y veo el daño que se está causando a los estudiantes y a los mismos docentes. Las autoridades universitarias fijaron una posición y en un mes no se han movido de la misma. No hay dinero, dicen y sabemos que es verdad, pero se puede diferir el pago del aumento que se acuerde en forma progresiva puesto que los docentes no están exigiendo el pago total y de inmediato. No negociaremos bajo presión, dicen, mientras la asociación de docentes no está segura de que se llegará a un acuerdo al bajar la presión.

El tiempo pasa. Es casi imposible recuperar el tiempo perdido. La mayoría de los profesores, en medio de la huelga, aplicamos exámenes con el contenido que se había podido desarrollar. No se puede tener a los estudiantes en forma indefinida en la incertidumbre. La medida anunciada de que sean los decanos  con los jefes de departamento y los docentes quienes busquen las alternativas en cada caso nos parece correcta. En mis 46 años de docencia (17 como profesor por hora en la UNAH por falta de méritos para una reclasificación) siempre he pensado que no hay ningún motivo que justifique el abandono de las labores educativas, pero en situaciones como la que vivimos nos encontramos entre la espada y la pared, entre la solidaridad gremial y el cumplimiento de un deber de conciencia. Urge el abandono de las posiciones intransigentes y buscar un punto de encuentro que, reconociendo el derecho de los docentes, encuentre una salida negociada. Negociada con el método ganar-ganar y no con el tradicional de todo o nada.

Los de la cuarta desde Casa Presidencial han dicho también este macho es mi mula. Todo el que piensa o disiente de su intransigente posición es descalificado. La correlación de fuerzas les es desfavorable. Tienen los partidos, el Congreso, la Fiscalía, una parte de la empresa privada, el Tribunal Supremo Electoral, las Iglesias y la Procuraduría en contra, pero insisten en que la cuarta va. El ataque furibundo a la Procuradora General de la República fue injusto e injustificado. Abundaron las falacias contra una funcionaria y una dama que por muchas razones merece respeto. 

Dijeron que la Procuradora había traicionado al gobierno y principalmente al Presidente que es su mandante, es decir quien le debe dar órdenes como si se tratara del ejercicio privado de la profesión del derecho.

La Procuradora, como otros funcionarios de alto nivel, es electa por el Congreso Nacional en el ejercicio de una de sus cuatro funciones, la función representativa. Y es así porque la Procuradora o quien desempeñe el cargo es el Abogado del Estado. Y aquí conviene aclararle a los de Casa Presidencial, que es el verdadero grupo de poder y no quines ellos señalan como tales, que Estado y gobierno no son lo mismo. Aunque el gobierno representa y actúa en nombre del Estado sus intereses pueden estar reñidos con el interés nacional y en este caso la Procuraduría debe ser fiel a los intereses del Estado, no del gobierno. El sofisma en contra de la Procuradora llego un poco más lejos al reducir el gobierno al Presidente e insinuar o decir claramente que la Procuradora, en este caso, es la abogada del Presidente y debe obedecer sus órdenes.

Nos hemos quedado sin Abogado, dicen los nuevos sofistas. La Procuraduría no es abogada del Presidente y menos de quienes desde casa presidencial dicen este macho es mi mula. Es abogado del Estado, cuyos cuatro elementos integrados en una unidad soberana son el territorio, la población, el orden jurídico y el poder público, estructurado en un sistema político permanente y representado por un grupo transitorio de personas electas por el pueblo para un período determinado y sometidas a la Constitución y a las leyes.

Eso lo sabe un estudiante de secundaria, especialmente quienes cursaron la clase de moral y cívica. El Presidente no es todo el gobierno y el gobierno no es el Estado, sino una parte del mismo en tanto y en cuanto mantenga sus actuaciones en el marco jurídico creado por el Estado y al cual deben someterse tanto gobernantes como gobernados si es que somos o queremos ser un Estado de Derecho. La Procuradora ha traicionado a su mandante, dijeron con una convicción digna de mejor causa. Al contrario, la Abogada Rosa América no es mandataria, y por lo tanto no debe recibir órdenes del grupo de la cuarta, sino que su mandante es el Estado y su mandato se encuentra en la Constitución y en la ley correspondiente.

Ponga los pies en la tierra doña Rixi. Usted, además de guapa, es inteligente y ha demostrado ser muy buena ejecutiva en la ENEE. Láncenos flores don Enrique, acuérdese de su padre que fue eminente profesor y decano de la Facultad de Derecho. Porque usted es inteligente, no crea que todos los gobernados somos estúpidos sólo porque no hablamos bajito y pausado. Qué mal se ve don Eduardo Enrique Reina como cuatrero (defensor de la cuarta), después de haberse desempeñado muy bien como Vicecanciller. Qué bien se ve Montoya con su habilidad habitual defendiendo la causa que le asignen. Nos recuerda al filósofo Carneades de la antigua Grecia. Qué bien. Este macho es mi mula.

lunes, 18 de mayo de 2009

LO JURIDICO Y LO POLITICO

Son dos realidades diferentes, pero interrelacionadas. Su relación es dialéctica en el sentido que va de la contradicción a la integración y viceversa. Lo deseable en un Estado de Derecho es que lo político, así como los otros comportamientos sociales, se sometan al orden jurídico. Sin embargo el poder y quienes lo ejercen, tienden a saltar el débil cerco del orden jurídico cuando no pueden reformarlo para acomodarlo a sus intereses personales, de grupo o de partido.

 

Esas dos realidades, lo jurídico y lo político, son estudiadas por dos ciencias diferentes, la ciencia jurídica, que es una ciencia normativa, y la ciencia política que es una ciencia empírica, centrada en el análisis de los hechos y no en las normas, en lo que es y no en lo que debería ser. Corresponden a dos profesionales diferentes, los juristas como expertos en el orden jurídico y los politólogos, expertos en el estudio del poder, su estructura y dinámica concreta a nivel nacional o internacional. Generalmente los juristas actúan ingenuamente frente al fenómeno político y los politólogos, que tienen que estudiar una fauna especial, el hombre como animal político, tienden a prescindir del orden jurídico para seguir solamente el curso de los hechos.

El Estado de Derecho tiene como propósito lograr que el orden político y sus actores se sometan a la ley so pena de caer en responsabilidad civil, administrativa y penal, pero sólo se ha vuelto una realidad en las sociedades donde existe una cultura de respeto a la ley tanto en las élites de poder como en el pueblo en general. En los países en los cuales ocurre lo contrario, el Estado de Derecho es sólo una aspiración de pocos, una declaración romántica contenida en el texto constitucional.

 

Mis cuatro años de convivencia con los estudiantes alemanes en Colonia y Bonn, me permitieron  percibir y vivir el respeto que los alemanes tienen por la Constitución y la ley. Después de la dolorosa experiencia del nacional-socialismo, que hizo estallar el orden jurídico y político existente con las consecuencias que todos conocemos, los alemanes se han vuelto muy cuidadosos en la conservación de su sistema democrático parlamentario. Han prohibido la existencia de partidos y grupos radicales de izquierda o de derecha y la formación política de los ciudadanos es un proceso continuo a cargo de una institución especializada, la Central Federal para la Formación Política.

 

En Honduras no existe la cultura de respeto a la Constitución y a la ley ni una institución que, con financiamiento del Estado, se dedique profesionalmente , con seriedad y compromiso a formar la conciencia democrática del pueblo. Parece que mantener al pueblo en la ignorancia y la desinformación fuera parte de la estrategia para que las argollas de todos los signos y colores se perpetúen en el poder.

 

Hoy por hoy estamos sumidos los hondureños en un debate jurídico-político que está ocupando todos los escenarios, los oficiales en las instituciones del Estado y los no oficiales como los medios de comunicación, los partidos y los grupos sociales organizados. El proceso está tomando tales matices que puede poner en riesgo el mismo proceso electoral y quizá esa sea la intención de parte de quienes han creado esta situación.

 

La cuarta urna es un proyecto político que tiene como propósito crear un nuevo orden jurídico y político que, según sus impulsores, terminará con todos los problemas del pueblo hondureño. Es un proyecto político alternativo y sólo en forma forzada se hace encajar en el orden jurídico vigente para posibilitar su ejecución. Avanza más por la vía de los hechos al impulso de todos los medios de que dispone el grupo en el poder en cuanto a publicidad, capacidad de manipulación y movilización que por el cauce del orden jurídico establecido.

 

Quienes adversan la cuarta urna y lo que suponen se esconde detrás, echan mano de argumentos de tipo jurídico-constitucional y por lo tanto están en desventaja- Sólo en la última semana se ha visto algún intento de pasar de las palabras a los hechos con la intervención de la Fiscalía y el inicio de un frente se supone que para defender el sistema democrático. Argumentos jurídicos contra hechos políticos consumados, lo jurídico contra lo político, no contiene como decíamos cuando practicábamos la división en la escuela primaria.

 

El proyecto de la cuarta urna trata de introducir el socialismo del siglo 21 en Honduras por la vía pacífica. La recepción que la idea ha tenido cuando ha sido espontánea y no producto de un contrato de compra-venta, se debe más a la decepción de la gente acerca de lo que existe que a su entusiasmo por lo que todavía no conoce. La gente está en contra de lo que hay más que a favor de lo que viene. Y esa decepción, que siempre es peligrosa para cualquier sistema, puede tener una salida pacífica o una solución violenta. Lógicamente es preferible lo primero. Si los gestores del sistema actual no van a hacer correcciones y por lo visto recientemente no los piensan hacer, habrá que aceptar por convicción o por cansancio el proyecto político alternativo que esconde la cuarta urna. Algunos, por oportunismo más que por convicción, ya lo han hecho.

Es tal la situación que por lo declarado por Mons. Darwin Andino y la respuesta del obispo de Copán, puede decirse que la cuarta urna ya dividió hasta a la jerarquía de la Iglesia. Conclusión: si el proyecto de la cuarta urna apunta a cambiar de raíz el sistema jurídico político, en vano se le trata de detener argumentando que viola el sistema que quiere derribar.

¿Estamos?

 

 

lunes, 4 de mayo de 2009

INFLUENZA -H1N1

No soy médico y menos infectólogo, pero es el tema de la semana y debo abordarlo. Lo haré a mi manera, porque no tengo otra. Se trata de la mal llamada influenza porcina o hache uno ene uno como está escrito en el titular. El jueves, día en que escribo esta columna, se habían presentado casos en 11 países. No valdría la pena hablar de pandemia, porque no se ha extendido a todo el mundo, pero por su fuerza expansiva puede extenderse a los casi doscientos países que existen en el mundo. No se le olvide que en griego pan significa todo.

Se trata de una enfermedad nueva y, por lo tanto, no se tiene experiencia en su manejo. Lo primero que sorprende es que el virus que produce la gripe en las aves, otro que lo produce en los humanos y el que hace lo mismo en los cerdos se hayan aliado para atacar al ser humano. Con esa mutación sólo se transmite de persona a persona y no del cerdo al ser humano de manera que lo egipcios mataron inútilmente a todos los chanchitos de esa nacionalidad. Lo primero que desearíamos es que los virus azules, rojos y de otros colores que existen en nuestro país hagan alianzas previas las mutaciones necesarias para atacar la pobreza.

Otra particularidad es que no hay vacuna. Hay que tomar algunas precauciones relacionadas con el contacto humano, pero para atacar la enfermedad hay que esperar que llegue. Y lo peor es que puede parecer una gripa normal y corriente. Si tiene temperatura elevada usted puede pensar que es una infección pasajera como hay muchas. Si le duele la cabeza puede pensar que es del estómago o una de las mil causas por las cuales nos duele el morro. Si tiene dolor en el cuerpo puede pensar que es por el trabajo o cualquier otra cosa. Si siente dolor en la garganta, pues hay varias razones por las cuales nos duele sin que nos hayamos muerto. Y si alguien tiene diarrea puede pensar que es el SIDA o mala digestión. Pero si siente todos esos síntoma, vaya corriendo al centro de salud o donde su médico. Haya ido a ver a los Tigres o no, aunque no está probado que los felinos transmitan la enfermedad.

No caiga en el pánico y no exagere las medidas relacionadas con el contacto humano. Si ni usted ni su pareja han ido a México ni han tenido contacto con gente que haya hecho ese viaje, sigan dándose el besito de las buenas noches y hagan lo mismo con sus hijos. Que ningún virus nos separe, excepto los de colores que hemos mencionado más arriba. Atendamos eso sí todas las recomendaciones sensatas y posibles que nos den las autoridades. Confiemos en que harán las cosas bien, aunque ya hubo los primeros pleitos por capitalizar políticamente el trabajo contra el H1N1, que no el H5N1 porque ese es el virus de la gripa aviar.

Todavía no se sabe por qué ha habido tantos muertos en México y casi nada en países como USA. Hay una explicación un poco ofensiva, pero que no se puede descartar y es que entre los aztecas el virus ha atacado a población pobre y desnutrida, el que sería nuestro caso por las condiciones de pobreza en que los virus de colores mantienen a la población. Otra explicación más aceptable es que por ser una enfermedad desconocida y haberse iniciado en México influyó en este caso el factor sorpresa, es decir la falta de preparación y experiencia, Puede ser.

Volvamos a los síntomas. No se alarme si sólo le da dolor de cabeza, porque puede ser como efecto de la abrumadora y costosa campaña publicitaria a favor de la cuarta urna o por cualesquiera otras publicidades oficiales. Si usted es Abogado y amanece con dolor en el cuerpo o con diarrea relaciónelo con la celebración de su día el 30 recién pasado. Si es sindicalista y le tocó el discurso de su organización por el Día del Trabajo acuérdese que su dolor de garganta se puede deber a que forzó mucho las cuerdas bucales como si no había sistema de sonido. Si es docente universitario en la UNAH puede ser que la huelga le esté haciendo daño. A propósito felicitaciones a la nueva rectora Julieta Castellanos. Que Dios la aleje de todos los virus que se mueven en el ambiente.

Mis recomendaciones, como infectólogo aficionado son las siguientes:

1-Calma. No cruce el punte antes de llegar al río.
2-Pida y confíe en Dios.
3-Oiga y practique las recomendaciones de las autoridades de salud.
4-Observe a su familia, especialmente a los niños y actúe oportunamente.
5-No oiga a quienes quieren ver en todo acontecimiento los signos del fin del mundo .Son terroristas que atentan contra su salud mental.
6- No asiste a reuniones si no es absolutamente necesario.
7-Absténgase de aplicarse antivirales que no dan ningún resultado.
8-Si siente los síntomas que hemos mencionado y sospecha que no es una gripa común, póngase las pilas.
9-Si le regalan un viaje a México con todos los gastos pagados, no lo acepte.
10 Confíe en que el riesgo pronto pasará porque no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista.
Felicidades a los trabajadores que trabajan y a los que tienen la suerte de cobrar sin trabajar, que les dure cien años.
Felicidades a los Abogados que llevan su profesión con orgullo, rectitud y abnegación. A los otros, felicidades también.
Animo a los docentes de la UNAH que reclaman la indexación del salario mínimo de cuerdo al estatuto del docente universitario y que la huelga dure lo menos posible en aras de la educación universitario.
Y que Dios nos proteja contra la influenza que dijimos y de la cual seguiremos oyendo hasta que desaparezca el peligro.